Es una unidad funcional básica que representa una tarea o acción específica dentro de un flujo de programación visual. Cada nodo encapsula una funcionalidad determinada, como recibir datos, procesarlos, interactuar con sistemas externos o generar salidas, permitiendo construir aplicaciones complejas mediante la combinación de múltiples nodos interconectados.
Características principales:
Funcionalidad encapsulada:
Cada nodo está diseñado para realizar una tarea específica, lo que promueve la modularidad y reutilización de componentes.
Los nodos pueden ser configurados mediante propiedades ajustables que permiten adaptar su comportamiento sin necesidad de modificar el código interno.
Programación visual:
Los nodos se agregan al flujo arrastrándolos y soltándolos desde una paleta en el editor visual de Node-RED.
Se conectan entre sí mediante líneas que representan el flujo de datos, facilitando la comprensión y diseño de la lógica de la aplicación.
Categorías de nodos:
Nodos de entrada: Inician el flujo al recibir datos o eventos, como mensajes MQTT, entradas GPIO, solicitudes HTTP, entre otros.
Nodos de procesamiento: Manipulan, transforman o analizan los datos recibidos. Incluyen nodos como function para código personalizado, switch para decisiones lógicas, y change para modificar propiedades.
Nodos de salida: Envían datos o acciones hacia sistemas externos, como publicar mensajes MQTT, escribir en bases de datos, enviar correos electrónicos o activar dispositivos.
Nodos sociales y de comunicación: Interactúan con servicios como Twitter, Telegram o Slack, permitiendo integrar funcionalidades de mensajería y notificaciones.
Extensibilidad:
Node-RED es altamente extensible; los desarrolladores pueden crear nodos personalizados según sus necesidades específicas.
Existe una amplia biblioteca de nodos contribuidos por la comunidad que amplían las capacidades del sistema, disponibles a través del Node-RED Library.