ZigBee es una tecnología inalámbrica de comunicación de corto alcance, de bajo consumo y bajo costo, utilizada principalmente para redes de área personal (PAN) y dispositivos IoT (Internet de las cosas). Se basa en el estándar IEEE 802.15.4 y crea redes de malla (mesh), donde cada dispositivo puede actuar como repetidor de señal, extendiendo el alcance de la red.
Características clave de ZigBee: Bajo consumo: Diseñada para funcionar con dispositivos que utilizan baterías, prolongando su vida útil. Redes de malla: Cada dispositivo puede repetir la señal de otros, ampliando el alcance de la red y mejorando la confiabilidad. Bajo costo: Es una tecnología relativamente económica para implementar, lo que la hace ideal para aplicaciones de consumo. Seguridad: Ofrece mecanismos de seguridad para proteger la comunicación inalámbrica, como la encriptación. Compatibilidad: ZigBee es una tecnología estandarizada, lo que facilita la interconexión de dispositivos de diferentes fabricantes.
Aplicaciones de ZigBee:
Domótica: Control de luces, enchufes, termostatos, cerraduras inteligentes, etc. Automatización de edificios: Control de sistemas de iluminación, HVAC, seguridad, etc. Sensores: Recolección de datos de sensores de temperatura, humedad, movimiento, etc. Industria: Control de procesos industriales, automatización de fábricas, etc.
Comparación con otras tecnologías:
WiFi: ZigBee tiene un alcance más limitado que WiFi, pero consume menos energía y es más adecuado para redes de malla. WiFi tiene una mayor velocidad de transferencia de datos, pero consume más energía.
Bluetooth: ZigBee tiene un alcance mayor que Bluetooth y es más adecuado para redes de malla. Bluetooth tiene una mayor velocidad de transferencia de datos y es más adecuado para comunicaciones punto a punto.
Z-Wave: Z-Wave es otra tecnología de comunicación inalámbrica utilizada en domótica, similar a ZigBee, pero con algunas diferencias en el protocolo y el alcance.