Un Indicador Clave de Rendimiento en español) es una métrica cuantificable que se utiliza para evaluar el rendimiento de una organización, proyecto, proceso o actividad específica en relación con objetivos predefinidos. Los KPIs permiten a las organizaciones medir su progreso hacia metas estratégicas, identificar áreas de mejora y tomar decisiones informadas basadas en datos. Son herramientas esenciales en la gestión empresarial, el Internet de las Cosas (IoT), sistemas embebidos y en cualquier ámbito donde se requiera monitorear y optimizar el desempeño.
Características principales:
Relevancia estratégica:
Los KPIs deben estar alineados con los objetivos estratégicos de la organización o proyecto, reflejando aspectos críticos para el éxito.
Medibles y cuantificables:
Deben ser expresados en términos numéricos que permitan una evaluación objetiva y consistente en el tiempo.
Específicos y claros:
Cada KPI debe tener una definición precisa, evitando ambigüedades, para asegurar una comprensión común entre todos los involucrados.
Accionables:
Los KPIs deben proporcionar información que permita tomar acciones concretas para mejorar el rendimiento o corregir desviaciones.
Temporalidad:
Incluyen un marco temporal para su evaluación, como diario, semanal, mensual o anual, facilitando el seguimiento y comparación histórica.